Evolución de las relaciones en las redes sociales.

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Las relaciones o, dicho de otra manera, el amor, es un tema que a todos interesa, y de lo que todos hablan, lo que todos piensan, imaginan o escriben. El amor está en nuestra vida, es algo que cualquiera necesita. Nos rodea, y al estar presente en nuestro día a día, evoluciona y se adhiere a nuestro tiempo, a nuestras costumbres, propias de la época moderna. Y este es el punto clave: cómo a lo largo de los años el ser humano nunca ha necesitado de estos medios, las redes sociales, para enamorarse y forjar una relación seria, y cómo estos medios han pasado a formar parte de nuestras relaciones como herramientas habituales e, digo más, indispensables.

 Empezamos con Facebook, y hablar de Facebook es hablar de tonteo, y para tonto el que lo niegue. Perdón, ya sigo: los mensajes privados son privados por algo, y el chat y las fotos, el escaparate. De hecho hay gente que, al comenzar una relación, hace borrón y cuenta nueva, formateo y vía. De esta manera se evitan celos tontos y situaciones embarazosas. Ojo si el Facebook de tu novio/a al poco de empezar a salir sufre una avería que le obliga a abrir otra cuenta, ahí sí hay motivo para sospechar. A lo que iba, ¿quién no ha metido unas cuantas fichas por el chat o en las fotos?. Algún like atrevido, un par de comentarios cargados de intenciones, y el contacto está hecho. Algunos, tímidos a la cara, aprovechan un privado para preguntar lo que no se ha preguntado. Otros, valientes, buscando algo más serio, logran enfrascar a su fichaje en una conversación profunda acerca del amor y los valores. Por eso, miles de romances hacen de Facebook su cuna, de la que (si hay suerte) se alejarán gateando hacia algo más estable y maduro. Y claro, yo me he preguntado: ¿llegarán a la sede de la empresa de Zuckerberg cartas de agradecimiento escritas por parejas felices? Algún día preguntaré. Algún día. Ya preguntaré.

Del Facebook al Watsapp, lo que se traduce en varios momentos de infarto en los que crees que el mensaje es de él/ella, pero en realidad es de tu madre recordándote las croquetas que te quedan en el congelador para la cena. Y es aquí, entre emoticonos de besos y  «buenas noches» de después de las primeras citas, donde me encuentro con el ‘Fenómeno Watsapp”: Hay que admitirlo, todos abrimos y contestamos a unos primero y a otros después, hay una cierta clasificación dependiendo del interés que nos susciten las personas que nos escriben. En este fenómeno logro distinguir tres niveles de jerarquía: en primer lugar, obviamente, los que queremos leer y contestar cuanto antes, casi con ansiedad; en segundo lugar, a los que contestamos después de los primeros (con tranquilidad, sin prisa ninguna); y , por último, los pobres individuos que corresponden al tercer nivel, ellos son a los que ni contestamos. Mira que somos cabrones. Obviamente, hay excepciones, así que a los que se sientan aludidos, por favor, no se sientan ofendidos. Olé. Si el Facebook es la cuna, el Whatsapp es la adolescencia, juventud y madurez de las relaciones. Desde quedar con tu pareja, a las buenas noches y buenos días, incluso para comentar algo gracioso del trabajo, utilizamos esta red social. La relación también se estabiliza aquí, con alguna declaración esporádica pero intensa o largas conversaciones nocturnas en las que nos creemos conectando con la otra persona a un nivel más íntimo y nunca explorado.

El Twitter aparece poco en el recorrido de una relación. Esporádicamente alguna foto o  retweet, pero al ser una red social más global y pública, no es la  más utilizada para mandar mensajes de amor. Puede ser más utilizada al principio, en la etapa inicial del tonteo. Con los piropos cruzados y los links compartidos, se puede. Sin embargo, el uso de esta red social es escaso en materia de relaciones. Pasamos al último escalón. 

 La relación puede evolucionar al/en el Skype. Aquí, los más agradecidos son los que se encuentran en una relación a distancia. Es un medio un poco defectuoso en ocasiones, pero eficaz para la función que ejerce. También resulta útil para las parejas que, aunque vivan cerca, cuenten con días en los que no han podido quedar: en vez de contarse las cosas por Whatsapp, que yo comparto y entiendo que pueda llegar a cansar, se llaman gratis por Skype y, con suerte, tendrán hasta buena calidad en la llamada. Obviamente, lo que cada pareja haga en la intimidad de sus webcam’s, queda entre ellos. Yo no juzgo a nadie.

http://www.youtube.com/watch?v=MLGFnjzrJyE 

Normalmente, cuando un noviazgo termina, se termina como Dios manda: a la cara. Desde aquí advierto a todos: que no me entere que alguien que sea lector de este blog deja a su pareja por Whatsapp, Facebook o siquiera llamando por teléfono: NO, NO, NO Y NO. SI LO HACÉIS ASÍ OS CONDENARÉIS AL FUEGO ETERNO. Un poco de valentía por favor. Aquí las redes sociales no tienen nada que hacer. Pero esa “f” es muy puñetera, y los celos y la curiosidad son una mezcla peligrosa. Quien no lo quiera confesar es muy libre de hacerlo, pero yo sé que todos hemos hecho aquello de ver las nuevas fotos del ex o de la ex, que vaya novio más feo se ha echado, no darles ni dos telediarios y cerrar el ordenador con dignidad. O eso de rallarse hasta la saciedad por un comentario en su muro de una amiga. ¿Qué amiga joder? Vaya zorra, seguro que va a calentarle la cabeza. Ejem.

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La frecuencia de visitar el Facebook de un ex, sin embargo, decrece cuando la dignidad propia aumenta, y cuando nos damos cuenta de que no nos hace ningún bien. Pasar página no sirve, hay que cambiar de libro. Es entonces cuando llegas a casa, enciendes el ordenador, lees tu correo, abres una nueva pestaña y te metes en tu cuenta. Notificaciones, fotos nuevas… ¿eso es un mensaje privado?.

http://www.youtube.com/watch?v=z6ssvXyKpPk

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5 respuestas a Evolución de las relaciones en las redes sociales.

  1. Lucille dijo:

    Llevas mucho tiempo sin escribir. Todo ok?

  2. Julia Ojidos dijo:

    Buenos días, te he nominado » Liebster Award». Por la calidad de tu trabajo en este blog.
    Síguelo en;
    http://juliaojidos.wordpress.com/2014/05/09/buenos-dias-feliz-como-una-perdiz-otra-nominacion-esta-vez-liebster-award/
    Un saludo.

  3. perdriel27 dijo:

    Te he nomidado para THE VERSATILE BLOGGER AWARD
    http://perdriel27@wordpress.com
    Un Saludo desde Árbol en tierras Salvajes .JP.

  4. A los ex no se los espía. Se los bloquea. ¿Me ha dejado?¿Me ha humillado? Entonces no tiene sitio en mi vida personal ni virtual. Claro que mucha gente quiere mantener siempre abierta la puerta (o ventana) del Facebook para volver a empezar la relación. Craso error. Soy de la opinión que hay que luchar por una relación pero si esta se vuelve tóxica hay que cortarla del todo. La experiencia enseña mucho.
    Por otra parte, hay mucho valor a través de las redes porque como no ves a la persona el rechazo es menos humillante. Duele lo mismo, pero al menos no te han visto la cara de tristeza cuando te han contestado que nada quieren contigo. Esto tiene también la cara B. Puede enseñar el mensaje a la gente para burlarse de ti.
    Las relaciones por internet también me hacen pensar en la fidelidad ¿Considerarais una relación por internet una infidelidad? Hay quien piensa que no, que el cibersexo no son cuernos porque no es real pero en realidad ¿no hay un engaño a nivel emocional? ¿No es eso incluso peor que dejarse llevar por un calentón momentáneo? Quizás diciendo esta frase parezca muy tradicional pero yo unos cuernos jamás los perdonaría. ¿Flirteo y relaciones a traves de redes sociales serían engaños? Las nuevas tecnologías modificarán nuestra forma de relacionarnos y también nuestro forma de pensar. No sé si a mejor o a peor, pero ya lo están haciendo.
    Finalmente yo creo que lo que favorece el mundo virtual son los amores platónicos. Esos amores que no llegarán nunca a nada… y por ello no te decepcionarán.

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